Diseñado para el calor del hogar, el gasóleo C tiene un nivel más alto de parafinas y una mayor densidad, lo que lo hace ideal como gasóleo para calefacción. Estas parafinas le dan un gran poder calorífico, además de los tres tipos de gasoil es el más económico.
• Aporta mayor rendimiento, debido a la mejora en el proceso de combustión, por lo que consigue mejorar el aprovechamiento del calor.
• Alarga la vida útil de la caldera, impidiendo la acumulación de partículas y polvo en su interior.
• Reduce el impacto medioambiental y los perjuicios de otras fuentes de energía.
• La correcta conservación y el mantenimiento de la caldera suponen un mayor ahorro.